Conozca de qué se Trata la Cirugía Ortognática
Junio 14, 2017
Con frecuencia, existen pacientes que durante sus etapas de crecimiento desarrollan alteraciones en sus rasgos faciales debido a deformidades que se forman en sus maxilares. La condición rompe con el equilibrio que debe tener el rostro cuando los maxilares crecen con normalidad. Para atender ese problema, puede buscar la ayuda de un odontólogo que sea especialista en cirugía oral y maxilofacial para aliviar las molestias y mejorar el aspecto de su rostro. Algunas zonas que pueden ser corregidas con una cirugía oral y maxilofacial son la mandíbula superior o maxilar, los huesos cigomáticos, la nariz, las regiones orbitarias, los dientes, todos los tejidos blandos que recubren el esqueleto facial, la región cervical y la vía aérea del paciente.
La cirugía maxilofacial es, entonces, una especialidad dedicada al estudio, diagnóstico, tratamiento, prevención y rehabilitación de las enfermedades congénitas y adquiridas en toda la estructura facial.
Ahora bien, la cirugía oral y maxilofacial, permiten precisar qué es la
Cirugía Ortognática: esto se refiere a la corrección de las anomalías o malformaciones esqueléticas que incluyen la mandíbula o el maxilar.
Los pacientes candidatos para una Cirugía Ortognática presentan:
Mordida abierta: esta alteración se caracteriza por la imposibilidad de juntar los dientes superiores e inferiores, en otras palabras, la persona no puede alinearlos ya que estos se encuentran muy abiertos; esta condición no les permite tener contacto. La alteración afecta el movimiento natural de la mordida porque el paciente no puede realizar ninguna de las funciones básicas masticatorias ni fonatorias de forma correcta.
El tratamiento indicado para corregir la limitación del paciente es una Cirugía Ortognática bimaxilar en la que el odontólogo posiciona ambas arcadas, la de la mandíbula y el maxilar, y aplica una técnica de rotación y traslación para su nueva ubicación. Tras la cirugía, el perfil del paciente mejora, así como también la funcionalidad de la mordida.
Sonrisa gingival: suele ser la alteración del aspecto de la sonrisa. Esta característica se centra en la encía superior del paciente, puesto que al sonreír se nota alargada. La malformación facial presenta un exceso vertical del maxilar superior y le otorga al paciente una cara muy larga y poco armónica.
La solución para mejorar la exposición de la encía es una Cirugía Ortognática bimaxilar que impacte el maxilar superior. El procedimiento que aplica el cirujano maxilofacial tiene la finalidad de recolocar la encía hacia arriba para eliminar el exceso de la misma y que el paciente pueda tener una sonrisa menos exagerada. Este tratamiento quirúrgico también ayuda a suavizar los rasgos faciales para lograr un rostro más redondeado.
Asimetría facial: la condición se identifica cuando el paciente presenta una desarmonía en el rostro, específicamente en el plano vertical. Su característica principal es que un lado de la cara se observa descompensado con respecto al otro extremo. Es esencial destacar que la anatomía humana no es 100 % precisa; eso no indica que la mayoría necesite una corrección, pero sí existen pacientes con un grado mucho mayor de desproporción que requieren una Cirugía Ortognática para mejorar el perfil de su cara.
Los rasgos que revelan la asimetría facial son:
- Región maxilar: un lado de la mandíbula se encuentra desarrollado en exceso y el rostro de la persona luce desproporcionado.
- Otra parte de la cara: incluye el tejido blando o duro en cualquier área del rostro y se le conoce como asimetría generalizada.
- Dientes: cuando estos se encuentran en posición incorrecta o conlleva a asimetría del área maxilar.
Cada una de las asimetrías amerita un procedimiento y dos de las posibles soluciones practicadas por el odontólogo son la Cirugía Ortognática bimaxilar, donde el cirujano trabaja sobre el hueso de la mandíbula; y la Cirugía Ortognática monomaxilar, que se efectúa solo en una de las dos estructuras esqueléticas del rostro: el maxilar superior o inferior.
Esta intervención, más que mejorar la apariencia de la cara, tiene como finalidad principal aliviar las molestias que el paciente puede sentir al masticar.
Prognatismo mandibular: la deformidad facial describe la presencia de una discrepancia entre los maxilares. Es común que, con esta condición, el paciente tenga la mandíbula y el maxilar superior desalineados, y el mentón muy desarrollado y ubicado hacia delante.
Esta alteración facial también es conocida como clase III y presenta los siguientes rasgos:
- Hueso de la mandíbula desarrollado de forma anormal.
- Exceso de mentón.
- Mandíbula prominente a causa de la presencia de dientes desalineados.
Dos posibles soluciones de la alteración facial pueden ser: Cirugía Ortognática bimaxilar, cuando el cirujano maxilofacial trabaja sobre el hueso mandibular y maxilar; o Cirugía Ortognática monomaxilar, cuando el odontólogo aplica técnicas quirúrgicas sobre una de las dos estructuras esqueléticas. El objetivo de esta intervención es llevar la base de la mandíbula a su posición correcta para que el mentón luzca armonioso y los rasgos faciales del rostro sean suavizados.
Retrognática mandibular: también conocida como clase II, es una alteración de la estructura esquelética donde la base de la mandíbula está desalineada en relación con el maxilar superior. Esta condición es contraria al prognatismo mandibular porque, en este caso, el mentón luce contraído o hacia atrás, modificando así el perfil del paciente de forma evidente.
Esta alteración no solo afecta la estética del paciente, sino, también, su nivel fisiológico, porque la malformación puede provocar una patología llamada "apnea del sueño", condicionando de forma negativa la calidad de vida de la persona que la padece.
La retrognática mandibular se detecta:
- Cuando el hueso del maxilar superior presenta un crecimiento anormal.
- El mentón luce retraído.
- El paciente presenta malformación en sus dientes.
La Cirugía Ortognática que el paciente necesita para esta alteración es bimaxilar o monomaxilar, según lo que su condición requiera. La intervención tiene por objetivo llevar el maxilar superior a su posición ideal para que el mentón ya no luzca retraído y el paciente mejore los problemas asociados con la masticación y/o la apnea del sueño.
En conclusión, la Cirugía Ortognática puede ayudar en gran medida a aquellos pacientes que sufren alteraciones esqueléticas o faciales. Los procedimientos también ayudan a suavizar la apariencia del rostro, para que la persona tenga rasgos faciales armónicos que encajen con el resto de su cara. Algunas alteraciones pueden necesitar de ortodoncia, pero esta es una decisión del médico tratante, en conjunto con el paciente, en la medida que va observando los resultados después de la cirugía.
Si usted siente molestias al masticar o sufre de apnea del sueño, tenga en cuenta que requiere una revisión lo más pronto posible. Puede dirigirse al consultorio de la Dra. María Clara Jaramillo. Esta especialista es una de las más experimentadas en cirugía ortognática en la ciudad. Para agendar su consulta con ella, llame ahora al
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